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jueves, 7 de agosto de 2014

Al infinito y más allá

Para Notas


Proyecto Posadas vuelve sobre el tópico de los setentas y la militancia de la mano del mítico líder del troskismo intergaláctico.


“Posadas es un personaje súper importante y es rarísimo que nadie lo conozca”, cuenta Michelle Wejcman, la directora de esta obra que va por segundo año en cartel y narra la historia de un grupo de militantes posadistas en la década del 70 y la reconstrucción de ese momento por parte de estudiantes de cine en la actualidad. Es que Homero Rómulo Cristali Frasnelli (alias J.Posadas) es efectivamente muy poco conocido más allá de algunos pequeños círculos, en general vinculados a la izquierda. Pero su ¿movimiento? aún sigue vigente y forma parte de una de las variantes del trotskismo más ¿exóticas?, vinculadas al comunismo ¿intergaláctico?

Posadas nació en Argentina en 1912 y falleció en Italia en 1981. Empezó su actividad militante como dirigente sindical obrero. En 1947 organizó el GCI (Grupo Cuarta Internacional) y a partir de ahí, desarrolló secciones trotskistas en varios países de América Latina y constituyó el BLA (Buro Latinoamericano de la Cuarta Internacional), en disidencia con otras organizaciones trotskistas tanto nacionales como latinoamericanas. Al día de hoy el posadismo sigue existiendo y defiende las banderas del “socialismo mundial”.

Sin embargo, lo que más suele rescatarse de Posadas (y esta obra lo retoma) es la idea de un socialismo interplanetario. Su razonamiento era simple: si los extraterrestres llegan a comunicarse con nosotros es porque la evolución de sus fuerzas productivas es superior a la de los humanos, pero ese nivel de desarrollo solo puede conseguirse en el socialismo, ergo, los extraterrestres son socialistas y nosotros debemos emularlos.

“Usamos al posadismo como excusa para hablar de una época”, aclara Wejcman y agrega: “Se usa el pasado para pensar la actualidad, para pensarnos hoy”. Así la obra muestra dos momentos diferenciados, por un lado la organización del cumpleaños de Posadas por parte de un grupo de militantes en los setenta y la reconstrucción de ese episodio en la actualidad. El hilo conductor es el lugar: una barbería de época que le da a la obra un carácter diferente, no sólo porque el escenario es una peluquería de verdad sino porque los espacios reducidos generan una intimidad especial. “Al ser un encuentro clandestino sumaba mucho que el espacio fuera real para que el público sintiera que estaba espiando algo prohibido y para poder jugar con la calle”, explica la directora.

Y es que si bien es cierto que mucho de lo que sucede en esta obra remite a lo clandestino, su mayor acierto tiene que ver con mostrar el interior de una organización política sin la solemnidad que suele agregarse en las lecturas más tradicionales. Mucho de lo que pasa en esta peluquería tiene que ver con el clima de los setenta, pero también con la resignificación que se hace en la actualidad de aquellos años. Los dos actos son así un todo conectado por la locación pero también por la memoria y el juego con la nostalgia es permanente, reforzado por un lugar que parece salido de 1910.

Sin embargo, la Barbería La Época no es una peluquería antigua sino que fue construida así en 1998 por su dueño, Miguel Barnes, autodenominado “el conde de Caballito” y todo un personaje del barrio. “La forma de promocionar mi salón fue a través de lo cultural, hicimos siempre espectáculos, con escenarios, obras de teatro, bandas y hasta la gente se instalaba en la vereda de enfrente”, cuenta Barnes y asume que lo suyo es un oficio doble: “Soy coleccionista y peluquero, tengo más de diez mil piezas guardadas y 16 barberías desarmadas para hacer el gran museo con el que siempre soñé”.

El viaje en el tiempo que propone “Proyecto Posadas” es, entonces, triple. Estamos en un lugar que aparenta ser antiguo pero no lo es, viendo una obra de teatro que reconstruye la década del setenta pero que, a la vez, tiene un segundo acto donde se recuerda esa época. A riesgo de morir de Inception, Marty McFly nos recuerda un canto popularizado por la Juventud Peronista: “¡No son bengalas ni luces de colores, son los trotskistas en platos voladores!”


Ficha artístico-técnica
Proyecto Posadas
Autoría: Andrés Binetti
Dirección: Michelle Wejcman
Actúan: María Eugenia Alvarez, Fabian Caero, Malala González, Laura Igelko, Geraldine Lapiduz, David Ledezma
Duración: 60 minutos
BARBERÍA LA ÉPOCA
Guayaquil 877
Reservas: 153 175 1592
Entrada: $ 85,00 / $ 70,00 – Viernes – 21:00 hs

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