Los viajes muchas veces sirven para huir, escaparse de los problemas,
los conflictos o aquello que a uno lo abruma tanto que prefiere no
mirar. Los viajes también otorgan la perspectiva necesaria para entender
que la vida que uno tiene es simplemente la que elige tener, y que eso
que muchas veces se nos impone como imposible de modificar es,
simplemente, una elección más.
En Apenas el fin del mundo se presenta el conflicto de la
vuelta de un viaje de Louis (Carlos Sims), el protagonista, quien
abandonó su casa paterna en un momento difícil y ahora vuelve a anunciar
su inminente muerte. Su familia, que lo esperó ansiosamente durante
toda su ausencia, tiene mucho para contarle pero también se suceden
cataratas de reproches acerca de lo que sucedió cuando él no estaba.
Más allá del argumento, las declamaciones hacia Louis tienen un tinte
monologal intenso, en el que los actores dejan bastante claro que la
ira, cuando es mucha, no puede expresarse solo en palabras. Los límites
del lenguaje son aquí, nuevamente, puestos en relieve. Irse es abandonar
la discusión, quedarse es sostenerla hasta convencer al interlocutor,
volver es reanudar esa contienda.
La obra es una adaptación de Federico Ponce (actor, docente y
director del Grupo de Teatro Independiente ¨El Galpón¨ de la ciudad de
Luján) de un texto de Jean-Luc Lagarce, prolífico autor francés de
teatro no convencional, asociado comúnmente a Beckett o a Ionesco. En
ese sentido, más allá de las logradas actuaciones, la estrella en esta
obra es el guión. Enfermo de Sida, de lo que morirá en 1995, Lagarce
construye esta obra en 1990 y algo de lo autobiográfico se intuye. De
dónde huyó el autor, hijo de padres proletarios que decidió estudiar
filosofía y teatro, qué debería haber hecho un homosexual como él según
la mirada de sus padres y cómo afrontar su inminente muerte pueden ser
links directos a la vida del dramaturgo en esta obra.
Así, al ser una adaptación de una obra extranjera, Apenas el fin del mundo
nos aleja de la mirada costumbrista del teatro local, volcando casi
como en el túnel del tiempo muchos de los conflictos familiares del
siglo XX europeo, con más o menos asidero en la actualidad nacional pero
dejando claro que su preocupación no es coyuntural, sino universal: el
viajero que huye, tarde o temprano detiene su andar.
FICHA TÉCNICO ARTÍSTICA
Actúan: Flor Calvo Reiriz, Emilse Díaz, María Cristina Quevedo, Carlos Sims, Julián Vilar
Asistente de dirección: Zoilo Garcés
Producción general: Zoilo Garcés
Autor: Jean-Luc Lagarce
Traducción: Jaime Arrambide
Dirección: Federico Ponce
Supervisión artística general: Rubén Szuchmacher y Graciela Schuster
INFORMACIÓN
ElKafka Espacio Teatral
Lambaré 866, Ciudad de Buenos Aires
Vía mail: elkafka@gmail.com – Tel. 4862.5439
Localidades: $120 – Estudiantes y jubilados: $70
Reservas a través de Alternativa teatral
Duración: 90 minutos
Viernes a las 23- Hasta el 28 de noviembre.
FICHA TÉCNICO ARTÍSTICA
Actúan: Flor Calvo Reiriz, Emilse Díaz, María Cristina Quevedo, Carlos Sims, Julián Vilar
Asistente de dirección: Zoilo Garcés
Producción general: Zoilo Garcés
Autor: Jean-Luc Lagarce
Traducción: Jaime Arrambide
Dirección: Federico Ponce
Supervisión artística general: Rubén Szuchmacher y Graciela Schuster
INFORMACIÓN
ElKafka Espacio Teatral
Lambaré 866, Ciudad de Buenos Aires
Vía mail: elkafka@gmail.com – Tel. 4862.5439
Localidades: $120 – Estudiantes y jubilados: $70
Reservas a través de Alternativa teatral
Duración: 90 minutos
Viernes a las 23- Hasta el 28 de noviembre.
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